Guía práctica para la prevención de la disfonía infantil

En este documento elaboraremos una guía práctica sobre recomendaciones y pautas a seguir en la prevención de la disfonía infantil, tanto en el ámbito escolar como en el familiar.

Comenzaremos con pautas y recomendaciones para las familias:

• Detectar las señales de alarma de disfonía y acudir a un especialista, así como acudir al médico en caso de resfriados no resueltos y/o laringitis recurrentes.
• Ofrecer un modelo de voz adecuado, hablando en un tono medio y dirigiéndonos al niño a una distancia prudencialmente corta, evitando los malos hábitos vocales tales como los chillidos, la tos, el carraspeo, hablar rápido o no articular, utilizar un tono inadecuado, etc.
• Procurar que el niño no hable demasiado cuando tenga la voz “tomada” o ronca, manteniéndolo ocupado con actividades relajadas como dibujar o juegos educativos.
• Evitar ambientes excesivamente cargados y cerrados o en los que haya mucho ruido (humos, música alta etc.) así como factores que puedan irritar las cuerdas vocales (humo, polvo, humedad ambiental demasiado fría y aparatos de aire acondicionado o calefacción que resecan el ambiente).
• Favorecer la hidratación (bebiendo líquidos a temperatura ambiente: ni muy fríos ni muy calientes; haciendo inhalaciones de vapor (vahos); tomando infusiones y mucha agua, etc.)
• Evitar la ingesta de alimentos muy salados, especias, alimentos muy picantes, alimentos muy dulces. Tener cuidado con los tipos de miel y caramelos (no eucalipto), y con los ácidos. Evitar comer demasiado antes de acostarse.
• Proporcionar al niño un sueño regular y estable, aproximadamente entre unas 10-12 horas.
• Supervisar la higiene bucodental visitando al dentista, habituar al niño a cepillarse los dientes después de las comidas y controlar el consumo de azúcar.
• Prescindir de las moquetas (sean sintéticas o no) en las habitaciones; pues retienen un gran número de alérgenos.

En cuanto a las recomendaciones para los profesionales de la docencia que estén en contacto con el niño, proponemos las siguientes:

• Detectar las señales de alarma de la disfonía, así como comunicarlo a las familias para que acudan a un especialista, que será el encargado de abordar la rehabilitación.
• Del mismo modo que los familiares, los docentes también se convierten en modelo a imitar, por la tanto será importante promover un modelo de voz adecuado, hablando con una buena articulación y con un ritmo adecuado con pausas y con tranquilidad.
• Favorecer los buenos hábitos vocales en los niños, enseñándoles a controlar los chillidos, disminuyendo la cantidad de los mismos. Así como técnicas de autocontrol que le permitan controlar sus conflictos emocionales.
• Asimismo, se deberá llevar a cabo un trabajo preventivo de la voz integrado dentro del currículum, trabajando de manera sistemática ejercicios respiratorios como soporte de la voz hablada.
• Procurar que el aula reúna unas condiciones acústicas óptimas, manteniéndola silenciosa para que cuando se inicie el diálogo no sea necesario forzar la voz.
• Acostumbrar a los niños a hablar de uno en uno, respetando los turnos de palabra, para entender lo que nos dicen.
• Enseñar al niño a controlar el ambiente (los compañeros) con el cuerpo, las miradas, la cara; pero no con la voz.
• Corregir y controlar la postura corporal y la posición de la cabeza del niño (facilitando de esta forma una fonación y respiración adecuadas), así como evitar que cruce las piernas, pues ésto altera la posición del diafragma.
• Acostumbrar a los niños a “escuchar” el silencio, permaneciendo algunos instantes callados para favorecer la concentración antes de explicar, decirles información etc”.

BIBLIOGRAFÍA

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Sánchez, M. (2018). Disfonía y pautas de prevención  vocal. Recuperado de: http://www.logopediasanchinarro.es/disfonia-y-pautas-de-prevencion-vocal/